Hablan testigos de la muerte de Valentín Elizalde

Testigos de la muerte de Valentín Elizalde se impactaron cuando
escucharon los disparos en contra del cantante, que iba a bordo de una
camioneta, incluso algunos fanáticos piensan que si se hubiera
detenido a firmar autógrafos podría haber salvado su vida.
Una fanática del cantante manifestó: ‘‘Nos aventamos al piso porque
escuchamos balazos, si él se hubiera detenido un momento para
firmarnos un autógrafo, no le hubiera pasado nada’’.

Miguel Ángel Domínguez Zamora, periodista del periódico La Tarde de
Reynosa, comentó el suceso:

‘‘Cuando llegamos vimos la camioneta baleada, nos asomamos y nos
dimos cuenta que se trataba de Valentín Elizalde. Las mujeres fueron
las que empezaron a llorar, se desmayaron, trataron de abrir la
camioneta, pero la policía no los dejaba’’, anotó.

Detalló: ‘‘Alcancé a ver a un hombre que se le salieron las lágrimas y
estaba tomando fotos por el celular, fue algo muy fuerte, muy
impactante’’.

‘‘Se quedó recargado hacia el lado derecho, él venía del lado del copiloto
en la parte trasera, como se que quiso cubrir de los balazos. Así como
yo los veo, como que ni se esperaban algo así’’, puntualizó el periodista.

El camarógrafo Blas Díaz Reyes anotó que la camioneta, al parecer, no
era blindada: ‘‘Todos los disparos traspasaron el vehículo, creo que no
traía seguridad’’.

Unos 15 mil admiradores dieron un recibimiento y la despedida, en un
impresionante acto, a Valentín Elizalde, entre aplausos, música, gritos,
aclamaciones y con llanto.

De esa forma, los miles de seguidores, se abalanzaron en Ciudad
Obregón para demostrar su cariño al ídolo originario de Jitonhueca,
Municipio de Etchojoa.

La Plaza Álvaro Obregón fue el espacio donde los “fans”, amigos,
familiares y artistas recibieron al “Vale” y quienes abarrotaron las calles y
sitios aledaños para darle el último adiós al intérprete.

Debido a que la plaza fue insuficiente para los fanáticos, los pasillos de
la iglesia de Catedral de Jesús y los balcones y escaleras de Palacio
Municipal también fueron ocupados para presenciar, aunque sea de
lejos, los restos del hijo del también querido y fallecido can tante
Eduardo “El Gallo” Elizalde.

A las 13:35 horas un auto con música del “Gallo de Oro” anunció la
llegada del ídolo; unos corrían y otros aplaudían ansiosos por verlo.

Los 120 elementos de Seguridad Pública Municipal que resguarda ban
el “orden” en las calles 5 de Febrero, entre Hidalgo y Allende, se
perdieron entre la multitud que se arremolinó a las 14:00 horas.

Ese tiempo marcó la llegada de Valentín en una carroza blanca, en
compañía de su mamá Camila Va lencia y de su hermano Jesús “El
Flaco” Elizalde.

¡Valentín, Valentín!, ¡El Vale, el Vale, ra, ra, ra!, fueron las porras que
cientos de sonorenses le gritaban al ídolo etchojoense.

Los miles de fans –que según Seguridad Pública Municipal estimó en
casi 15 mil– impedían descender el féretro del “Gallo de Oro” y “El Flaco”
Elizalde pidió a los admiradores hacer una valla y espacio para bajar el
cuerpo; Valentín permaneció al centro de la plaza por lo menos una hora.

A las 14:50 horas, a pocos metros de la plaza y dentro de la Catedral, se
escuchó un Padre Nuestro y un Ave María, oraciones que al unísono
decían cientos de personas que esperaban la celebración eucarística,
que iniciaría a las 15:00 horas en honor al artista desaparecido.

A las 15:10 horas, pidieron a los feligreses salir, porque el cuerpo de
Valentín fue trasladado a Navojoa.

A petición de la mamá Camila Valencia no se celebró la misa, a fin de
evitar algún riesgo por la gran cantidad de personas que había.

Hoy a las 8:00 horas, en la Hacienda de “El Vale” en Navojoa se oficiará
misa y será trasladado a Guasave, para ser enterrado junto a su padre
Eduardo Elizalde.